jueves, 14 de enero de 2016

Socrates primer Coach

Fue alrededor del año 450 A.C. cuando Sócrates inventó el Coaching. El filósofo griego fue el primero en emplear y promover el Diálogo como el mejor medio para motivar a sus discípulos a “alcanzar el conocimiento y la verdad”. Él lo llamo “El Arte de la Mayéutica” y básicamente consistía en hacer preguntas a sus discípulos para que fueran ellos mismos los que llegarán a sus propias conclusiones. Es decir, que Sócrates confiaba en que cada uno de nosotros tiene y conoce la verdad, y que tan sólo necesita el diálogo, el debate, la motivación, para alcanzarla.
Esta idea a cerca de la fuerza del diálogo fue continuada por Platón, su discípulo, al que también el Coaching le debe gran parte de su principios básicos. Fue este filósofo, discípulo de Sócrates, el que decidió dejar por escritos Los Diálogos, basados en una secuencia de preguntas y respuestas entre el maestro y él alumno, que bien podrían pasar por una sesión de Coaching de hoy en día.
Por otro lado, gran parte de la filosofía platónica se basaba en la idea de que la educación es formadora de carácter. Es decir, que el conocimiento de uno mismo es la clave fundamental para “alcanzar la verdad” que está dentro de nosotros.
El Coaching tal y como lo conocemos ahora se basa en el mismo principio: nuestra capacidad para mejorar, para desbloquearnos, para superar obstáculos, está en nosotros mismos.
La ayuda de un especialista que, como Sócrates, nos guíe con las preguntas adecuadas, nos hará darnos cuenta de que tenemos las respuestas.
Hoy en día el Coaching ha logrado demostrar su eficacia en terrenos como el deporte, la salud, la empresa y la vida personal. Incluso en nuestros cursos de Kleinson hemos comprobado que es un recurso clave para motivar y ayudar a nuestros alumnos a alcanzar sus objetivos en el área de idiomas.
Y aunque en realidad no sea un método tan novedoso e innovador como creíamos, lo cierto es que sí se ajusta a la perfección a las necesidades de casi cualquier individuo del Siglo XXI. Después de todo, si hay algo que hemos perdido desde los tiempos de la Grecia Clásica es esa capacidad de preguntarnos sobre nosotros mismos y sobre nuestra realidad. Por suerte, poco a poco, la vamos recuperando.

EL MAGNO TUTOR DE ALEJANDRO

EL MAGNO TUTOR DE ALEJANDRO
En este recién estrenado 2016, se cumplen nada más y nada menos que 2.400 años del nacimiento de uno de los padres de la filosofía occidental: Aristóteles.
Nacido en Estagira (Reino de Macedonia) en el año 384 a.C, Aristóteles, conocido también por el apodo de el Estagirita, era hijo del médico del rey Amyntas de Macedonia. Esta circunstancia propició que, años más tarde, el hijo de este rey, Filipo II de Macedonia, encomendara a Aristóteles la formación intelectual de su hijo de 13 años. Este niño era Alejandro Magno.
En un retiro de la ciudad macedonia de Mieza, Alejando estuvo bajo la tutela de su maestro recibiendo lecciones sobre política e historia natural. También aprendería los poemas homéricos de memoria y se convertiría además en un ávido lector. Según cuentan, todas las noches, colocaba la Ilíada debajo de su cama. Cuando Alejando ingresó en la carrera militar, Aristóteles regresó a Atenas para fundar su propia escuela, el Liceo, (llamado así por estar situado dentro de un recinto dedicado al dios Apolo Licio).
En el Liceo, muchas de las clases eran públicas y gratuitas. Aristóteles prefería dar sus clases en el gimnasio que incluía un perípatos, es decir, un pórtico largo o paseo porticado, y lugar donde impartía clases científicas por la mañana y por la tarde daba conferencias sobre retórica y otros temas de interés general. Los estudiantes debían colaborar en las tareas de búsqueda de información, clasificación y catalogación, tanto de documentos, leyes y constituciones como de animales y plantas. En su metodología, Aristóteles, no existía la imposición de doctrina alguna sino que se estimulaba la crítica y la originalidad de pensamiento de cada uno de sus alumnos. Todo un adelantado en su tiempo, Aristóteles, era digno de admiración, no solo por su dominio en varias disciplinas, sino también por reunir una vasta biblioteca y contar con una cantidad de seguidores e investigadores, conocidos como los peripatéticos (de περιπατητικός, 'itinerantes', llamados así por la costumbre que tenían de discutir caminando). De hecho, la mayoría de los trabajos de Aristóteles que se conservan son de este período.
Aristóteles había sido discípulo de Platón, que a su vez lo había sido de Sócrates. Sin embargo, tras la muerte de Platón, Aristóteles decide separarse de la doctrina de su maestro y crea un nuevo concepto más realista: no cree en un mundo ideal sino en las ideas que están en nuestro mundo. Piensa que lo que en realidad existe son individuos, cosas y objetos. Y opina que es nuestra capacidad de pensar la que crea los conceptos. Entendió al hombre como un animal racional y político. Racional porque nos distinguimos por la razón y capacidad de pensar y reflexionar sobre lo que hacemos, y ‪#‎político‬ porque el hombre tiene que vivir en la polis (ciudad) en comunidad con los demás. Su argumento se basa en que un ser que hereda un lenguaje que no ha inventado tiene que compartir su mundo de símbolos con su comunidad.
Cuentan que, en cierta ocasión, le preguntaron en qué se diferencian los sabios de los ignorantes, a lo que Aristóteles respondió: “En lo que los vivos de los muertos”. Según él, el saber durante la prosperidad sirve de adorno, pero en las adversidades de refugio. Por ese motivo, Aristóteles elogiaba sobremanera a los padres que instruían a sus hijos, porque además de haberlos engendrado, les procuraban una la vida feliz.
Tras la muerte de Alejandro Magno en el 323, una ola de nacionalismo se extendió en Atenas, volviéndose esta ciudad un lugar incómodo para los macedonios. Aristóteles, que era de origen macedonio, no tardó en ser acusado de impiedad (no cumplir con sus obligaciones religiosas). Como no estaba en su ánimo repetir la aventura de Sócrates (acusado también de impiedad y posterior envenenamiento por cicuta), Aristóteles prefirió exiliarse a Calcis, en la isla de Eubea, donde murió al año siguiente.
La influencia que este gran filósofo ha tenido en el mundo ha sido extraordinaria. Tras el mundo clásico, fueron los árabes quienes redescubrieron a ‪#‎Aristóteles‬ y, a través de ellos, pasaron a la filosofía escolástica de la Edad Media. Posteriormente su influjo seguirá vigente en el pensamiento filosófico y en todos los grandes pensadores. No sólo toda la antigüedad se hace cargo de su ingente enciclopedia. Su Metafísica será el fundamento filosófico de la posteridad. Su célebre teoría de las seis formas de gobierno, donde advierte que la ‪#‎corrupción‬ de la ‪#‎democracia‬ es la‪#‎demagogia‬, siguen asombrándonos todavía hoy en día y nos invitan a preguntarnos por qué…Posiblemente, en la respuesta a esta pregunta, es donde encontraremos el verdadero principio de la ‪#‎filosofía‬.
Por ese motivo, con sus luces y, a pesar también de sus sombras, el primer artículo de este año de #2016 declarado por la UNESCO, como “Año de Aristóteles” va dedicado a este magno filósofo y científico, fundador de la lógica y de la biología. Sus ideas tuvieron gran influencia en el desarrollo de la historia intelectual de Occidente, ya que llegó a escribir cerca de 200 tratados de múltiples materias, entre las que se incluyen: lógica, metafísica, filosofía de la ciencia, filosofía política, ética, estética, retórica, física, astronomía y biología, transformando muchas de las áreas del conocimiento. Pero, especialmente, en agradecimiento por habernos enseñado la importancia que tiene mantener viva la capacidad de sorprendernos todos los días y encontrar a través de las pequeñas cosas que nos rodean nuestro propio camino hacia la ‪#‎felicidad‬.